4 de octubre de 2007

Resultado de la lavandería

Aquí el resultado de la lavandería made in China. Antes era ropa blanca.


Sin comentarios.
Bueno, sólo uno: ¿por qué no salio naranja!? Rosita, genial...

China. Rio Li y Yangshou

Guilin es otro pueblecillo (1,3 millones de habitantes) bastante turístico. Decidimos ver el río Li, con sus características montañas. Las opciones disponibles son cruceros organizados: para extranjeros o para chinos. Mal asunto, aunque no estaría mal meterse en el barco de chinos, es más barato y está etiquetado como "small and noisy". Vamos, cargado de chinos fumando y comiendo. Aun así eso de coger un viaje organizado da repelús. Hay una tercera opción, que es coger un lancha privada, pero hacen falta al menos cuatro personas. Por suerte coincidimos con dos chicas danesas que quieren hacer la excursión, así que compartimos lancha con ellas. Ah, unos de los consejos que leí es "evitar barcos pesqueros ilegales que ofrecen recorrer el río". Juas, con lo divertido que sería! (barco ilegal, barco ilegal quiero).

El viaje por el río Li dura 3 horas. Una de las danesas esta algo rellenita y la verdad que la barca va un poco inclinada hacia su lado. Va bastante inclinada, todo sea dicho. Vamos, la chica es gorda. El chino conductor no para de corregir el rumbo constantemente, hasta que en un momento dado para la barca y dice a la danesa directamente que se cambie de sitio! Ufff, vaya tela...

Los paisajes son bonitos, bonitos.

Aunque hay demasiado barco. ¡Qué horror hubiera sido estar dentro de uno de esos de turistas!

No hubo naufragio y llegamos a Yangshou, que es un pueblo sólo y para turistas. No vale nada, salvo si quieres ver autobuses de turistas. La guía Lonely Planet, la guía de los viajeros independientes, lo recomienda, muy mal. Lonely Planet mal. Voto negativo.

El transchiniano. De Shanghai a Guilin

Atrás quedó el Transiberiano, ahora esto se parece, pero en versión china. Llevo desde Moscú así, salvo el trayecto desde la frontera entre Mongolia y China hasta Beijing, que fue en autobús cama.

Esta vez de Shanghai a Guilin son sólo 23 horas. Literas de tres pisos, no hay compartimentos y sí muy poca intimidad.

Qué buena idea es llevar una bandera de España y olé.

Aquí una diminuta viajera del tren.

Añado que Ángel y yo somos los únicos pasajeros no chinos del tren. Las anécdotas y peculiaridades de los chinos-de-tren las dejaré para otra ocasión, pero aseguro que viajar mezclado con ellos no tiene desperdicio.

China. Más Shanghai

Shanghai tiene el equivalente a nuestra calle Preciados, aunque un poquino más grande y con algo más de luces de noche.

¿Donde esta Wally?

Aunque no muy lejos y a pocos metros aun existe una zona antigua algo mas desfavorecida.

No deja de ser extraña esta ciudad-experimento-capitalista del gobierno chino.